ENSAMBLE

 

 

PRELUDIO DE UN ENSAMBLE

 

Mi propósito era hablar del credo del poeta,

pero, al examinarme, me he dado cuenta

de que yo sólo tengo un credo vacilante. Este credo

tal vez sea útil para mí, pero difícilmente servirá a otros

 

Jorge Luis Borges

 

I.- El Renacer. Retomar los Pasos Perdidos

 

Siendo profesora de Lengua y Literatura, era de esperarse que de alguna manera quisiera imitar a esos grandes escritores que admiraba y que consumía cada día en mi lectura y que, muy en mi interior, fuese una escritora frustrada. Soñé  siempre con escribir, pero nunca imaginé que escribiría poesía. Me imaginaba escribiendo cuentos, de hecho, escribí unos tres o cuatro que quedaron olvidados en el tiempo. Los escribí cuando aún estudiaba docencia en el Pedagógico de Caracas. Como historia repetida hasta el cansancio, escribí, como otros, para mis amigas y, una vez, para mi hermano. De aquellos escritos sólo queda el recuerdo y las ganas de retomarlos.

Durante mi vida como estudiante del Pedagógico de Caracas, conocí a excelentes docentes. Nombres como: Minelia de Ledezma, Rosario Russotto, Luis Álvarez, Elvano Vivas, Hugo Obregón, Italo Tedezco, Sergio Serrón, están en mi memoria como quienes dejaron huella imborrable en mi formación. Sin embargo, recuerdo de manera muy especial al profesor Buenaventura Piñero, quien murió muy joven víctima de un cáncer. Fue quien me enseñó a amar de manera muy especial a la Literatura Latinoamericana, sobre todo su realismo mágico y realismo maravilloso. Recuerdo que en aquel momento, se hablaba mucho de la raza cósmica (¿o era él quién hablaba mucho de ello?). El profesor hacía referencia a que el mundo debía llegar a lo que nosotros somos actualmente, una raza formada por todas las razas. Me enseñó que en nuestras  venas tenemos lo mejor del indígena, la poesía que está en sus genes dominantes, su amor por la tierra y su total entrega a ella. Del afrodescendiente, su fortaleza, su resistencia y su amor al trabajo. Del blanco, el dominio de lo racional que unido a lo anterior, termina en un perfecto equilibrio. Con sus palabras, me sentí la más mestiza de los mestizos y con mayores ganas de escribir.

En esa época, había un poema que me hacía llorar cada vez que lo leía. Por casualidad, me correspondió analizarlo para una exposición de Literatura Venezolana. Demás está decir que terminé con los ojos llenos de lágrimas sin tener clara la razón. Ahora que lo vuelvo a leer, noto que en él, se conjugan las ideas de mi maestro: Buenaventura Piñero. Aquí se los dejo para el disfrute:

NIÑO CAMPESINO

La choza enclenque y parda lo acunaba en su puerta

Con el orgullo ingenuo de las ramas torcidas

Que tremolan al viento la flor que les nació

 

Era un niño terroso que miraba el barranco

Era un niño harapiento

Con los ojos inmutables del indio

Y los rasgos ariscos del negro

 

Uno cualquiera de los cien mil niños

Que nacen en las chozas marchitas de mi tierra.

Yo me detuve ante la puerta

Y el niño de la choza

Arrancó su mirada impasible del barranco

Para fijarla en mí…

 

Yo le dije:

-¿Estás solo?

Y el habló con la voz cadenciosa del indio:

-Las flores del barranco son amigas

(Era un niño poeta.

Yo lo había presentido en los ojos profundos)

 

-¿Pero no tienes miedo?

Y él habló con la voz jactanciosa del negro:

-Yo soy el macho ¿sabe?

Mi hermanita se jue con mamá a cortá la leña

(Era un niño valiente

Yo lo había presentido en los rasgos audaces).

 

Después le hablé del palpitar del río,

Del verde hecho ternura en la hondonada

Y del verde bravío de la montaña

Él me dijo que amaba el sonido del viento

Y el azul valeroso de los cielos desnudos

Y el canto y el plumaje de los pájaros…

 

(Era un niño pintor,

O músico

O poeta)

 

Sirviome agua de la tinaja grande

Y cuando me marchaba

Me mostró la sonrisa fraterna de los negros.

 

Y se quedó mirando su paisaje

 y ferrado a su choza

como la flor al árbol…

 

yo descendí la choza

desbandando mi palomar de angustias

por los niños pintores,

por los niños poetas,

por los niños artistas

que nacen en las chozas marchitas de mi tierra

y se quedan mirando los barrancos

para toda la vida

 

por la obra que nunca ha de nacer

porque están en el mundo con las manos cortadas

esos niños terrosos de las chozas marchitas.

Miguel Otero Silva

 

Cómo se notará, el autor, conjuga en un niño el origen mestizo de nuestra raza, pero más allá de eso, se encuentra también una denuncia social. Es la imposibilidad que tenían (o tal vez tienen) lo niños de sectores humildes de concretar un sueño

Una vez que terminé mis estudios comencé a trabajar y me casé. Por supuesto, esto implicó nuevas responsabilidades. Comenzó el tener que madrugar, cocinar, lavar, planchar, atender al marido y luego llegaron los hijos. No es, de ninguna manera, que sienta que debió haber sido de otra forma, creo que cada cosa tiene su momento y el tiempo de Dios es perfecto. Si volviera a nacer, estoy segura que lo volvería a hacer. Lo cierto es que me olvidé de aquel oculto deseo y me dediqué a cosas más del diario acontecer, de las responsabilidades y de lo común, nada que ver con aquellos dioses de la escritura como Gabriel García Márquez, Jorge Luis Borges, Miguel Ángel Asturias, Cervantes y los siempre admirados por mí, los de una época inolvidable de la literatura venezolana: Miguel Otero Silva, Eduardo Liendo, Guillermo Meneses, Salvador Garmendia y otros que en estos momentos no nombro porque sería muy larga la enumeración. Como podrán observar, nombres todos dedicados principalmente a la narrativa, aunque algunos de ellos también escribieron textos poéticos.

Siempre mantuve la poesía a distancia. Cuando en pregrado tenía que hacer análisis de algún poema, en más de una ocasión, terminaba con el rostro bañado por el llanto. Siempre respeté a los poetas y nunca entendí ese empeño de hacer análisis con la poesía. Para mí, la relación con ella era algo íntimo, muy del interior del autor y del lector. Cuando en posgrado comenzamos a ver seminario de poesía, casi me reprueban. No lo hicieron, creo, que por no hacerme pasar la vergüenza. Cuando el profesor hablaba de ella era un sí pero no. “La poesía es esto, pero no”, la “poesía es aquello, pero no”; así que simplemente aprobé la materia “sí, pero no”. Sin embargo, recuerdo que en pregrado y posgrado, mis amigas me llamaban la atención sobre alguna frase que pronunciaba y me decían que era poética. Hace poco una compañera de trabajo dijo, llamando la atención sobre algo que dije, “pero si esta niña es poeta”, yo aún no lo creía (y tal vez, aún no lo creo).

Un día, hace poco más de un año, me descubrí por los pasillos de “El Mácaro” bebiendo con la mirada los paisajes naturales que en él dominan. Otra compañera de trabajo (me empeño en no nombrarlas) descubrió mi embeleso, y me dijo “a veces hay que tomarse el tiempo de conectarse con la naturaleza.” Y desde ese momento en adelante comencé a andar por los espacios, todos los espacios, con el alma suelta. Algo que me parece sumamente peligroso, porque cuando andas así, corres el riesgo de que te apresen el corazón. Creo que es exactamente lo que me sucedió, estoy con el alma presa, presa del amor, del dolor, de la tristeza, de la alegría, presa de la vida, pero de la vida sorbida en todo su sabor y su esencia. Y así, nació mi primer poema, cargado de mí convertida en árbol, aquí les dejo la primera estrofa:

IDENTIDAD          

I

Y es que me siento árbol

Demasiado arraigada para volar

No puedo más que mirar

El alto vuelo de un turpial

No puedo más que esperar

Que me busque para anidar

Y por más que pienso

En que mi  sombra puedo dar

Quisiera tener sus alas para volar

Ruby Ojeda

 

            Allí me descubrí y me acepté árbol. Luego, y en  desorden, aparecieron otros poemas que me lo reafirmaron como: “Indígena”, “Te amé, madre tierra”, “Emboscada”, “Mi padre” (necesariamente tenía que ser un árbol) y muchos otros en los que, creo, el tema está implícito.

Como cosa de la vida, un/a colega (sigue el misterio), me sugirió que me integrara a un grupo que se estaba formando para recitar poesía. En ese momento, le dije que no, le expliqué que no escribía poesía y que además leerla siempre me hacía llorar. De igual manera insistió, aunque esto nunca se concretó. Luego pensé que debía intentarlo. De este modo, comenzaron a nacer otros, sin ninguna estructura, sin ninguna métrica, con rima accidental, instintiva, no la buscaba, ella se daba sola, tal vez recordando la lectura de poesías tradicionales. Estos poemas fueron naciendo espontáneamente, con motivos diferentes.

II.- Navegando. El Encuentro de un Espacio

El artista no se siente diferente. La sociedad

lo diferencia. En cierto momento (…) le da

un codazo y le dice: -Usted no es de los nuestros.

Jaime Jaramillo Escobar

 

Pero quien escribe, aunque lo niegue, tiene la necesidad de ser leído, de saber si lo que escribe es bien recibido por el lector. Pues yo no escapo de esto. Así comenzó mi búsqueda de ¿reconocimiento? El espacio más fácil para ello, en este mundo de la información es el internet. Una de las redes más conocidas, sin querer hacer publicidad, es el facebook. En esta red, comencé mi peregrinar. Colgué allí mi primer poema, ya mencionado, pero no obtuve ningún eco. Entonces me di cuenta que para que me leyeran tenía que etiquetar a las personas y que por esa razón me llenó el silencio.

A raíz de esto, publiqué otros poemas y etiqueté a mis familiares y amigos más cercanos. Uno que otro me dio una opinión agradable para mi “ego” (por qué negarlo). Una vez que pasó la ceguera de la emoción, me di cuenta de que prácticamente los obligaba a leerme y pensé que tal vez los halagos eran motivados por el hecho de estar “etiquetados” y no por iniciativa propia. Dejé entonces de hacer esto y simplemente los dejé allí colgados (pobres mis poemas) y una que otra vez colocaban alimento para mi ego y le daba clip a un preciado “Me gusta”. Sin embargo, eso no me satisfizo, no me conformaba con que una que otra persona colocara un “me gusta” ni me gustaba la idea de etiquetar a la gente para que me leyera. Sentía que los estaba obligando a hacerlo. Además, si no tenía el ya mencionado “me gusta” o la etiqueta, no había manera de saber si alguien se había interesado en leer mis poemas.

¿Qué creen? En ese momento mi di cuenta de que la red social no era tan social o que algunas especies de ser humano no tenían cabida en ese espacio (o por lo menos no lo disfrutaban tanto). Además, los colocaba en ese lugar con miedo. Miedo a esas letritas que nadie lee, pero que dice una cosa muy importante:

Si no lo pueden leer, allí lo que dice es que cualquier información que se coloque en el facebook, puede ser usada a discreción del administrador del espacio (fotografías, textos, imágenes, etc), lo cual quiere decir que podían y poden hacer lo que quieran con lo que escribo, sacarle el jugo pues. No fue fácil copiar la información, tuve que hacer una fotografía para pegarla, el texto no permite el copia y pega. ¿por qué será? Abandoné ese espacio, no totalmente, aún paso por allí de refilón y dejo uno que otro poema, pensando que puede haber gente interesada en leerlos, pero los quito a los pocos días.

Así, comenzó mi peregrinaje por varias páginas de internet, buscando un lugar donde asentarme y asentar mis poemas. Envié uno que otro a concursos de poesía que aceptaran el envío vía correo electrónico, no todos lo hacen. De nuevo viviendo de ilusiones, cómo iba a tener esperanzas en un concurso una novata como yo, a la que apenas algunos versos la asaltan de vez en cuando y los escribe sin claridad. Por supuesto, mis intentos fueron infructíferos, pero pude percatarme de que la poesía tiene muchísimos seguidores (es que se me había olvidado que el mundo está lleno de seres humanos y no todos han perdido su humanidad). Me encontré con Blog de poetas, foros de poesía, páginas literarias, entre otras cosas que me dicen que hay muchísima gente interesada en leer y producir poemas. Es que todos compartimos sueños, ilusiones, desengaños… y a algunas personas, nos gusta dejarlos por allí regados.

 

III.- Poemas del Alma. La Evolución

Escribir, quizá, no tiene más justificación que tratar de

 contestar a esa pregunta que un día nos hicimos y que,

hasta no recibir respuesta, no deja de aguijonearnos.

Octavio Paz

 

Mi largo navegar,  me hizo llegar a una página que se ha vuelto muy significativa para mí, la cual visito de manera constante los fines de semana: “Poemas del Alma” (www.poemas-del-alma.com ). Es un foro donde publican poetas del todo el mundo. Todo tipo de poetas, poetas consolidados con premios internacionales y publicaciones, poetas  que apenas se inician, poetas que escriben por hobby y otros que,  no siendo poetas, utilizan la página para narrar sus temores y dolores, a veces, en forma poética… También hay quienes visitan la página para leer y hacer uno que otro comentario crítico que nos ayuda a aprender acerca de lo que escribimos y dejan aportes muy significativos.

Allí se me sembró la duda. Me preguntaba si lo que escribía sería o no poesía, si a la gente le interesaría leerlos, qué era lo poético en ellos. Entonces, leí con atención, busqué en todos aquellos poetas su lenguaje, su estilo. Publiqué para ser comentada por poetas consolidados y por otros que, como yo, se iniciaban en el mundo de la expresión poética. Descubrí que usaban seudónimos, pero en su perfil hablaban de premios y publicaciones. Agregué como amigos a aquellos de los cuales consideraba que tenían producciones con calidad poética y resultaron ser de los que más publicaciones tenían (de 100 a 300 poemas publicados) quienes aseguraban haber ganado premios literarios.

Sin embargo, ni sus comentarios, ni las muchas lecturas que aparecían en mis contadores me decían si mi producción era literaria o no. Tuve que buscar otras fuentes para ver si me llegaba un rayo de luz con algo de teoría y re-encontré a Octavio Paz (1967), en “El arco y la lira”. Allí, vi las mil y un cara de la poesía. Aprendí que está en todo, que domina los espacios y los tiempos tanto internos como externos. Aprendí que es una mirada, una palabra, es un algo diferente, pero común a todos. Paz (Idem, p. 3) al nombrar la poesía dice, entre otras cosas:

Expresión histórica de razas, naciones, clases. Niega a la historia: en su seno se resuelven todos los conflictos objetivos y el hombre adquiere al fin conciencia de ser algo más que tránsito. Experiencia, sentimiento, emoción, intuición, pensamiento no dirigido. Hija del azar; fruto del cálculo. Arte de hablar en una forma superior; lenguaje primitivo. Obediencia a las reglas; creación de otras. Imitación de los antiguos, copia de lo real, copia de una copia de la idea. Locura, éxtasis, logos. Regreso a la infancia, coito, nostalgia del paraíso, del infierno, del limbo. Juego, trabajo, actividad ascética. Confesión. Experiencia innata. Visión, música, símbolo…

 

            Concluyo entonces, que la poesía es completamente inherente a lo humano de cada mujer y de cada hombre. Se encuentra en la visión del mundo que cada uno de nosotros tiene y se expresa en un sentimiento que es común. Está en ese poder de reconocer que como ser viviente se pertenece a un universo que no es nuestro y que es por todos compartidos. De alguna manera siento que todos deberíamos poder ver la poesía de cada cosa, de cada ser y de cada no ser. Su expresión e identificación puede llegar a hacernos más humanos, con mayor sentido de humanidad para respetar y amar la naturaleza y al otro como igual. La poesía es sensibilidad, identificación, expresión. Me di cuenta así que cada verso, cada estrofa leída contenían poesía. Surge entonces la necesidad saber, si aquellas obras eran obras y si eran poemas.

            Ahora bien, de dónde nace la duda de si eran (tal vez son) o no poemas. Pues de la misma fuente de agua cristalina, de Paz (ibídem, p.3): Por otra parte, hay poesía sin poemas; paisajes, personas y hechos suelen ser poéticos: son poesía sin ser poemas”. Se corrobora el hecho de la omnipresencia de la poesía, pero qué pasa con el poema, cuándo lo que produzco es un poema.  Puede que su contenido sea algo poético, pero… ¿podía decir que era un poema? Es más… ¿me podía o puedo llamar poeta? De nuevo a mi eterna fuente.

 El poema es creación, poesía erguida. Sólo en el poema la poesía se aisla y revela plenamente. Es lícito preguntar al poema por el ser de la poesía si deja de concebirse a éste como una forma capaz de llenarse con cualquier contenido. El poema no es una forma literaria sino el lugar de encuentro entre la poesía y el hombre. Poema es un organismo verbal que contiene, suscita o emite poesía. Forma y substancia son lo mismo.(p.3)

 

En un poema hay poesía en la medida que expresa, de forma estética un contenido que, para mí, siempre es universal. Creo firmemente que es una cuestión de absorber el mundo con todos los sentidos, vivirlo y después plasmarlo. Y en la manera de expresarlo y hacerlo sentir está el secreto. En mi visita a la página pude observar los estilos más diversos. Hay quienes conservan las estructuras tradicionales, con rima y métrica preestablecida. Otros trabajan los versos libres, algunos hacen poesía en prosa y, de igual manera, varían los temas y preferencias en construcción de metáforas. Muchos de los poemas publicados en el foro son de excelente construcción y los poetas de la página saben valorarlos, los leen y los comentan a diario.

            Con mucha frecuencia los poemas publicados son de temas comunes, sobre todo cuando se trata del amor, del recuerdo y de las ausencias. Sin embargo, cada poeta lo plasma de manera diferente, con imágenes, comparaciones, metáforas, que le dan un estilo propio y diferenciado, lo cual le da mayor valor a su obra. En este punto, cabe citar nuevamente a Paz, pues él plantea que: “La única nota común a todos los poemas consiste en que son obras, productos humanos, como los cuadros de los pintores y las sillas de los carpinteros” (p.4) Cada poema es único en su composición y en su estructura, aunque los temas sean universales, como cuando de expresar lo humano se trata.

            Un poema puede manifestarse de muchísimas formas y los poetas del foro así lo comprenden. Y es que la poesía está principalmente en la manera de percibir el mundo. Es una manera de “ver” que posteriormente se convierte en una idea realizada, construida, que es el poema. Por lo tanto, no sólo el que escribe en verso es poeta. El poeta tiene una manera particular de admirar, observar y beber lo que a su alrededor se presenta y lo plasma de la manera como esto se le revela.

            Tal vez esta sea la razón por la cual, en las expresiones actuales se establece una especie de intertextualidad entre las artes. Las posibilidades que el internet proporciona para la incorporación de imágenes, sonidos, símbolos, entre otros han impactado de manera significativa la producción poética. Los poemas publicados en “Poemas del Alma” son acompañados por canciones, videos e imágenes que complementan su significado y le dan mayor belleza y atractivo lírico a lo escrito. Aquí manejo el término intertextualidad, según lo planteado por Simone (2000) quien afirma lo siguiente:

El término intertextualidad se refiere al hecho de que un texto dado se vincula de diferentes maneras a otros textos: citándolos, o tomando de ellos determinados ritmos, temas, argumentos, o reelaborándolos o parodiándolos… Para entender un determinado texto tenemos que conocer… una variedad de textos afines a él, y con los cuales se relaciona de una u otra forma (109-110)

 

            Así se presenta la intertextualidad en la actual poesía. Algunas veces el autor en sus poemas cita, menciona, referencia a otros poetas, canciones, obras famosas, entre otras cosas. Otras veces, acompaña  el texto con una imagen que la posibilidad tecnológica de crear y recrear la hace más poética y se establece una especie de vínculo entre el significado de la imagen y el texto poético. Agregan también música al poema, instrumental y no instrumental. En el primer caso, sugieren que sea escuchada mientras se lee el poema, en otros casos son canciones cuyas letras inspiran el poema. Su significado se nutre también con videos, ya sea famosos o creados por el poeta. Lo importante aquí, no es sólo la mera intertextualidad, sino el hecho de que, a partir de todos estos elementos, se hace la poesía más atractiva a los jóvenes que pasan la mayor parte de su tiempo navegando en el cyber espacio.

            Lo cierto de todo esto, es que aprendí varias cosas. En primer lugar, lo ya mencionado, que los estilos varían muchísimo de un poeta a otro, aunque no se puede negar que en mucho prevalece la idea de la métrica y la rima. Aprendí también que hay una estructura que parece eterna, el soneto, que a pesar de que su fondo no es el mismo, conserva la forma que es muy apreciada por los poetas. En segundo lugar, comprendí que la poesía es libertad y como tal permite al poeta liberarse de preceptos y estructuras cerradas para dejar libre su expresión y darle la forma que prefiera, pero que le dé valor al trabajo poético. La poesía también es conocimiento, es conocimiento del ser de lo que lo toca y lo afecta y es cultura en la medida que construye ese conocimiento desde la comunión consigo mismo y con el otro.

 

¿Cómo funciona el foro? El manantial

 

En este apartado, quisiera colocar la manera en que funciona el foro. No con el ánimo de hacerle publicidad, ya que existen muchísimas páginas similares, sino con el ánimo de expresar un poco como su funcionamiento hizo incrementar mi producción “poética”. Lo primero que encuentro al ingresar es que los poemas están a la disposición de quien ingrese a la página, es decir, cualquiera los puede leer y tienen un directorio que los clasifica por tema. Cada vez que alguien entra a leer uno de los poemas, se registra la lectura en un contador, si vuelvo a entrar desde la misma dirección, no se vuelve a contabilizar. Esto me pareció muy bien porque me permitía saber cuántas personas se interesaron en leer mis poemas.

Luego, me percaté de que algunos poemas tenían comentarios de las personas que los habían leído y respuestas del autor. Entonces, quise dejar un comentario, la página no lo permitía a menos que fuese un usuario registrado. Acto seguido, me registré. Me di cuenta que el funcionamiento es similar a las otras páginas de foros virtuales más conocidas: creas un perfil, colocas tus fotos… pero a diferencia de ellas: cuelgas libros, haces post acerca de temas interesantes, indican los libros que estás leyendo y… publicas poemas. Y así me inicié en esto de publicar poemas en internet.

La primera vez que lo hice, publiqué por supuesto mi primer poema “Identidad”. Muy pocas personas lo comentaron, puesto que era nueva en el foro. El foro sólo permite que se publique un poema diario por poeta, debido a la gran cantidad de personas que escriben. En otros, existen lo privilegiados que pagan una determinada cantidad y se les permite hasta tres por día. En este, todos tenemos la misma oportunidad.

Una vez que fui conociendo la mecánica comprendí que debía hacer amigos, lo que en otras páginas se llaman “contactos”, las personas al leer a veces les agrada tanto lo que leen que le envían una invitación de amistad al poeta, y así se va ampliando el círculo de lectores y de personas que comentan, terminamos todos siendo buenos amigos y viviendo con la presión de publicar porque eso esperan nuestros compañeros. Por esa razón, a veces abundan poemas dedicados a la ausencia de la tan preciada musa.

En la página se premia a quienes tienen la mayor cantidad de puntos por comentario y por lectura. Cuando comentas, si lo permite el poeta, puedes dar una calificación del 1 al 10 por el poema. Sin embargo, he notado que la mayoría, casi todos, los que publican prefieren la opción “Aceptar solamente comentarios” y evitan la calificación. Muchos otros prefieren sólo comentar y no calificar aunque el poeta lo permita. Lo cierto es que los poetas con mayor cantidad de comentarios y calificaciones son colocados en el muro del portal como poetas de la semana. Algunos con la intención de aparecer allí, agregan a muchísimas personas como amigos en busca de sus comentarios.

Independientemente de esto, los comentarios terminan siendo el premio para el poeta, esto y la cantidad de veces que se es leído. A medida que la comunidad va conociendo al poeta, las lecturas se incrementan y esto resulta muy satisfactorio. Además, se convierte en un foro de amigos, a los cuales terminas conociendo muy bien a partir de la lectura de sus escritos y los comentarios que dejan, algunos por amistad y generosidad y otros porque les parece que tienen un valor poético.

Todo esto permite una integración de los participantes a partir de un interés común: la poesía. A esto se le añade un valor agregado: los fusionados. Este es un tipo de poema que es el producto de la participación de varios poetas. Un poeta de la comunidad crea un tema y elabora una estrofa. A partir de allí, sugiere la participación de sus amigos o de todos los poetas de la comunidad, quienes agregarán una o más estrofas según lo haya diseñado el creador del fusionado. Algunos terminan siendo verdaderas obras de arte, pero otros se convierten en un “chorizo” como suelo llamarlos, porque se agregan estrofas demasiado largas y que pierden el hilo conductor del poema. Es un proceso bien interesante. Conoces a personas que tienen más o menos afinidad contigo, que puede que no sean profesionales, pero el hecho de compartir el interés por la poesía ya es bastante.

Y… así nació Ensamble, primero, de la necesidad de ser leída y, segundo, como un compromiso con los amigos del foro, quienes están pendientes de que publique y si no lo hago, preguntan por qué. Allí uno se siente valorado como persona y como escritora de poesía. Los poemas comenzaron a surgir solos, de diferentes temáticas, relacionadas con el amor, la maternidad, la soledad, la amistad, entre otros. Algunos nacieron de las relaciones establecidas en el foro y de lo allí leído. Encontrarán poemas dedicados al amor en la distancia, el amor entre poetas y dedicados a algún amigo del foro. Lo notarán por su contenido.

Finalmente, debo decir, que a mí, definitivamente, la poesía me tomó por asalto. Tal vez estaba escondida, esperando que me tomara el tiempo de mirarla, ahora que la miro, me tiene embelesada. Me enseña cosas de mí que ni siquiera imaginaba. Cada día llegan nuevos versos, van madurando, hasta que se expresan en lo que escribo. Han ido evolucionando, voy aprendiendo. Los poemas que constituyen el poemario, no tienen ningún orden lógico ni cronológico,  ni clasificación preestablecida, ni orden temático. Quien los lea, encontrará los temas más diversos y, creo, estilos diferentes, es parte de esa evolución y ese aprendizaje que deja la lectura y la práctica de la escritura.

Por lo pronto, siento que estos poemas están llenos de simplicidad. No tienen metáforas complicadas, todo lo contrario, están llenos de imágenes muy conocidas y repetidas, pero escritas con un particular estilo, mi estilo, que espero ir modelando con el tiempo. Están llenos de simplicidad porque me parece que los textos deben ser accesibles al lector. A veces las metáforas que empleamos nublan la comprensión y pienso que ese no debe ser el objetivo. Es cierto que lo poético está precisamente en eso, en esa forma especial y particular de expresar lo común y natural con una mirada distinta y un lenguaje que difiere de lo acostumbrado, pero siento que esto se puede hacer sin sacrificar la comprensión y accesibilidad del poema.

Me han dicho que el poeta no siempre tiene que escribir desde el sentimiento, pero yo todavía no sé hacerlo de otra manera. Espero en algún momento lograrlo. Mientras tanto, los poemas, en su conjunto, son la parte de un todo que soy yo (o tal vez el lector, o tal vez la invención) y que juntos conforman el rompecabezas de mi existencia (o tu existencia). Creo que está en quien lee darle sentido y orden a su contenido. Está en el lector ensamblarlos y hacer con ellos la imagen de su preferencia. Lo único que hice intencionalmente, fue colocar en primer lugar a “Identidad” y en último a “Simplemente… Soy”, porque el primero es una duda y el último me dibuja. Aquí les dejo mi “Sueño Trasnochado”, espero que lo disfruten tanto como yo escribiéndolo

 

Algunos sabios que me apoyaron en esta construcción

 

Jaramillo Escobar, J. Ser poeta Disponible:  http://www.enfocarte.com/5.25/X-504/para_ser_poeta.pdf  http://www.enfocarte.com/5.25/X-504/para_ser_poeta.pdf Consulta: 14-07-201

 

leer y escribir poesia http://unesdoc.unesco.org/images/0013/001395/139551s.pdf

 

Paz, Octavio(1967). El arco y la lira. Disponible: http://dl.dropbox.com/u/73049/Paz%20Octavio%20-%20El%20Arco%20Y%20La%20Lira.PDF Consulta: 12-07-2011

 

Reflexiones de Jorge Luis Borges sobre el arte de escribir. Disponible: http://arlequinhn.blogspot.com/2009/02/ensayo-reflexiones-de-jorge-luis-borges.html Consulta: 14-07-2011

 

Simone, R. (2000). La tercera fase. Formas de saber que estamos perdiendo. España: Taurus

 

12 respuestas

  1. Mis ideas acerca del Portal de Poesía han cambiado un poco, pero lo escrito aquí es tal cual lo escribí en el Trabajo de Ascenso. Saludos

  2. Ta bien bueno Ruby

  3. prof usted y sus cosas pero esta super bien e inspirador….

  4. Al leer esto reencontré a la chica sencilla que conocí hace mucho tiempo, la persona amable y sensible que un mal día de febrero desapareció para no dejarse ver más pero que dejó un recuerdo grato e imborrable en todos nosotros. Recibe de mi parte un cálido abrazo y los mejores deseos para ti y tu familia. Tus poemas son excelentes, no solo porque cubren con creces los requisitos formales de construcción (que en todo caso son los que menos importan en la buena poesía) sino porque cada uno de ellos revela un espíritu noble y delicado.

    Tu amigo de siempre, Pedro.

    • Hola Pedro. Nunca hubiese imaginado que volvería a saber de ti y mucho menos en este espacio. Hace tanto, tanto tiempo… Me llegaron viejos recuerdos a los que hace mucho no le daba ninguna pincelada.
      A Dios gracias todos estamos bien, con alguna ausencias, pero bien. En cuanto a mis poemas, no son más que una manera de expresarme, pero ya son tantos que los he ido dejando en este espacio y los aproveché para usarlos como trabajo de ascenso.
      Me agradó mucho volver a saber de ti. Espero que tú y tu familia se encuentren bien. Un abrazo desde esta distancia.

  5. «De alguna manera siento que todos deberíamos poder ver la poesía de cada cosa, de cada ser y de cada no ser.» Prof. esta es mi parte favorita, wow!!

  6. Me complace informarte que te he nominado para el premio Dardos:

    Nominación al premio Dardos


    Saludos.

  7. Que hermoso,es leer estos poemas que trasmiten mucha entrega y dedicación de una persona muy amable.

  8. Ruby: Me parece excelente toda la reflexión que hiciste sobre la poesía y pienso que lo debes seguir haciendo, porque todos los días descubrimos algo bueno en los demás y en nosotros mismos. yo pienso que cuando una escribe se descubre ante los demás y a veces nos sentimos inhibidas y no nos atrevemos a publicar; pero debemos dejar esos temores y atrevernos a ser. Espero seguir siendo tu amiga y que nos sigamos comunicando, para seguir creciendo como persona. Abrazos Ana.

    • Cierto amiga, debemos dejar los temores. A veces nos inhibimos, no nos atrevemos a mostrar lo que hacemos por temor a ser juzgadas. No somos perfectos, pero sí perfectible y en el compartir aprendemos y reflexionamos, eso nos da la posibilidad de cambiar.
      Freire dice que somos humanos porque tenemos conciencia de ser «inacabados»; nos hacemos cada día con cada experiencia, compartir contigo es toda una experiencia que me nutre y que espero me siga nutriendo y también dar mucho de mi en este compartir. Gracias por dejar tu comentario. Abrazos. Ruby

  9. hola ruby!
    leerte ha sido tan grato como conversar contigo. Con el alma suelta comienzo mi tránsito por la poesía, a tu lado y al lado de otros poetas.
    gracias por regalarnos tus versos y a través de ellos conocer a un bello ser, simplemente ruby!
    un abrazo y de nuevo gracias!

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